Escribía en esta sección el pasado mes de diciembre que desde los comienzos de esta web, la gente de La Roca Internacional Karate Punks merecía un hueco en esta publicación y así lo hice, con estas palabras: “Los karatepunks son un colectivo de La Roca HC del Vallés, una localidad barcelonesa situada en la comarca del Vallés Oriental, que unas veces en solitario, otras veces en colaboración con otros colectivos, se encarga de organizar conciertos, normalmente dentro del ámbito hardcore/punk, hasta el punto de haber colocado a La Roca en el mapa internacional del hardcore punk. Grandes nombres del estilo han pasado por La Nau, la sala donde se realizan estos conciertos, desde Poison Idea hasta DRI, pasando por Leatherface, What's happens next?, MDC o Hard ons, por mencionar algunos de los muchos grupos que han pasado a lo largo de los últimos años por allí. Todo el mundo en este ámbito quiere tocar en La Roca y no es para menos, porque La Roca es especial, en pocos lugares te tratan tan bien y uno se siente tan a gusto. Hacen que te sientas como un "roquerol" más. Y es que en el fondo, todo el que va alguna vez a La Nau se convierte en karatepunk.”
Creo que se nota el gran aprecio que siento por esta gente y es que para mi, La Nau era un punto de referencia en la escena musical de nuestro país y el colectivo “karate punk”, un ejemplo a seguir, tras más de diez años organizando conciertos. Gracias a La Nau y a sus conciertos mucha gente sabemos situar La Roca del Valles en un mapa.
Así que, desde hace unos días, cuando conocí la noticia del cese de los conciertos en La Roca, sentí una mezcla de tristeza e indignación que no me he podido quitar de encima desde entonces. Parece ser que el Ayuntamiento de La Roca del Vallés, después de más de 10 años, ha decidido que no se celebren más conciertos en La Nau, atendiendo a un supuesto informe técnico que dice que La Nau no reúne los requisitos legales para la organización de conciertos. Posiblemente estén en lo cierto, pero su actuación en este caso deja mucho que desear y lo más lamentable del caso es que, después de más de diez años parece ser que se van a tener que dejar de hacer conciertos en La Roca, pues no se han dignado a buscar un local alternativo para la realización de los mismos.
Supongo que todo vendría de antes, pues el rock sabemos que nunca ha estado muy bien visto por los políticos, pero quizás el desencadenante final haya sido la apertura de un supermercado Caprabo frente a La Nau y unos desgraciados incidentes provocados por gente ajena a este colectivo y a la gente habitual de los conciertos de La Nau. Parece ser que después de un concierto en La Nau, al cual acudió mucha más gente de lo habitual (pues serían unas 700 las personas asistentes, frente a los 100-200 de media que asisten normalmente, incluso llegando gente de forma masiva desde otras provincias), algunos descerebrados se dedicaron a realizar pintadas en el Caprabo y también rompieron algunas botellas de cristal en el parking de dicho establecimiento. Por estos incidentes se puso una multa al colectivo “karate punk”, a pesar de que los incidentes se produjeron después de haber concluido el conciertos, cuando La Nau ya estaba cerrada y que la gente que los provocó no eran habituales de los conciertos de La Roca. La multa se pagó. Después de esto, desde el Ayuntamiento de La Roca del Vallés se obligó al colectivo “karate punk” a contratar un seguro de responsabilidad civil y a contratar a un guardia de seguridad para cada uno de sus conciertos, si querían poder seguir realizándolos. Cumplieron estas peticiones, se gastaron una gran cantidad de dinero en contratar el seguro y se pusieron en contacto con una empresa de seguridad para contratar sus servicios para el próximo concierto. Fue entonces cuando desde el Ayuntamiento les notificaron su decisión de no dejar que realizaran más conciertos en La Nau. Y me pregunto yo, ¿no podían haber decidido esto antes de obligar a gastarse el dinero en un seguro que ya no es necesario, pues no se pueden hacer conciertos? Quizás es que pensaban que no podrían cumplir estos requisitos... pero si los cumplieron y entonces llegó el supuesto informe técnico. Dicen que han tomado esta decisión para garantizar la seguridad de la gente, pero no sé, da la sensación de que más bien quieran garantizar la seguridad de las paredes del Caprabo, que por otra parte no es que corran demasiado peligro, pues como ya he mencionado, los incidentes ocasionados en aquel concierto fueron un hecho puntual, provocados por gente no habitual de los conciertos de La Nau y que la propia gente del colectivo “karate punk” son los primeros en lamentar y en condenar estas actitudes propias de descerebrados. Quizás tenga algo que ver que Caprabo sea el patrocinador de otras actividades culturales a celebrar próximamente en el municipio de La Roca del Vallés. Al menos da que pensar este detalle.
Con esta decisión el Ayuntamiento de La Roca del Vallés se está cargando de un plumazo más de 10 años de expresión artística y cultural que han tenido como sede su municipio, gracias a la actuación desinteresada del colectivo “karate punk”. Más de diez años en los que, como ya he dicho, La Roca se ha convertido en un punto de referencia y un ejemplo a seguir, no sólo en la provincia de Barcelona, sino todo el país. Buena muestra de ello son las muestras de apoyo que se vienen dando desde que se conoció la prohibición. Desde todas partes del país e incluso desde algunos puntos del extranjero, en forma de carta, de email o de mensajes en el foro de debate de www.laroca.org, ha sido numerosa la gente que se ha solidarizado con esta causa y que ha enviado su queja por el cese de los conciertos en La Nau y su petición de que se reanuden o en su defecto se busque un local alternativo para que continúe la interesante programación de conciertos que desde hace más de diez años se viene llevando a cabo en La Roca. Sin embargo, parece ser que desde su ayuntamiento hacen caso omiso a estas numerosas quejas y siguen en su empeño de poner fin a una parte tan importante de la cultura de su pueblo. Tan sólo han contestado con un mensaje en el foro de debate de su web y un email de corta y pega (a toda la gente que ha enviado un email de protesta les han contestado con el mismo email de respuesta), firmados por el señor Francesc Arolas, regidor de juventud, en los que reafirman su decisión, atendiendo a la supuesta falta de seguridad de La Nau para la realización de conciertos. Un mensaje donde reconocen que se deja sin cubrir una parte de la demanda de cultura en el pueblo, pero no ofrecen alternativas. Donde además se permiten el lujo de decir que su ayuntamiento si que apoya la cultura porque están construyendo una biblioteca (que hay que tener valor para no tener una biblioteca en el siglo XXI y encima echarse flores por hacerla, en vez de pedir disculpas por no haberla tenido hasta entonces) y están construyendo o reformando varios centros culturales. Unos centros culturales donde, claro, no se realizarán conciertos.
Somos muchos los que no estamos de acuerdo con el cese de los conciertos en La Roca, los que pedimos que si no se puede usar más La Nau para realizar conciertos se busque un local alternativo y así lo estamos haciendo ver al Ayuntamiento de La Roca, mediante emails a laroca@laroca.org, mensajes en el foro de debate de su web y cartas. Aquí mismo puedes descargar en formato pdf una carta modelo, para imprimirla, rellenar con tus datos y poder enviar por correo.
Hoy y siempre, todos somos karate punks y decimos:
¡Que no cesen los conciertos en La Roca del Vallés!
Texto: Alfonso CRLM
